El alcohol, aunque es una droga legal, es una sustancia que puede crear dependencia. Muchas de las personas que comienzan a tomarlo es porque sienten una sensación eufórica, aunque en realidad afecta a modo depresor al sistema nervioso central, haciendo que se pierda el control sobre su consumo.
Uno de los problemas más comunes es que está socialmente aceptado, nadie va a quejarse a otra persona por tomarse una copa diciéndole que eso no se puede hacer, eso hace que su precio y adquisición esté al alcance de todo el mundo, aumentando los problemas de esta enfermedad.
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¿Cómo actúa nuestro cuerpo cuando bebemos alcohol?
Cuando se inicia el consumo de alcohol, aunque no se llegue al estado de embriaguez, es normal que pueda existir intoxicación, o lo que se suele llamar como el momento de bajón, donde influyen la fatiga, sueño, irritabilidad y tristeza. Esto afecta tanto a nivel emocionar como fisiológico y en la forma que tienen los individuos de comportarse.
1) Efectos a corto plazo
- Sensación de euforia
- Visión borrosa
- Mala pronunciación
- Pérdida de equilibrio
- Falta de coordinación
- Movimientos más lentos
2) Efecto a medio y largo plazo
- Cansancio y debilidad
- Anemia megaloblástica
- Fallos en el sistema inmunitario
- Daños en el hígado
- Ardor estomacal
- Úlceras y hemorragias en el estómago
- Diabetes de tipo 2
- Pancreatitis
- Anemia
- Alteración de pensamientos y sentimientos
- Daños cerebrales
- Pérdida de memoria
- Infertilidad
A todos estos efectos debemos añadir la posibilidad de desarrollar dependencia o adicción, a lo que se le debe sumar asistencia médica para solventar este problema y que no llegue a más.
¿El alcohol es un vicio o una enfermedad?
Podemos definir la adicción como una enfermedad crónica y reincidente del cerebro, que busca el consumo de alcohol para calmar la sensación de frustración y/o ansiedad, consiguiendo que el usuario esté cada vez más enganchado.
Teniendo en cuenta esta definición y los problemas que puede ocasionar el alcohol a algunas personas, podemos decir, sin miedo a equivocarnos, que el alcoholismo no es un vicio, es una enfermedad que necesita ser tratada por personal cualificado y con la experiencia suficiente para ello.
¿Cuál es el tratamiento para estos enfermos?
No importa si la persona es adicta o dependiente del alcohol. El periodo de desintoxicación puede variar dependiendo del estado en el que se encuentre la persona y los medios que haya que aplicar para garantizar su seguridad. Lo que sí es necesario es un equipo de profesionales que velen por su salud.
Algo que diferencia a los usuarios dependientes de los adictos es que los primeros, cuando experimentan consecuencias negativas por el consumo reiterado de alcohol ellos mismos se proponen dejar de beber, llegando en muchos casos a conseguirlo y dejando a otros tantos a las puertas. Los adictos, por mucho que lo intenten, no son capaces de lograrlo por sus propios medios.
Sea cual sea el caso es necesario acudir a un Centro de desintoxicación y tratamiento del alcoholismo en el tratamiento de este tipo de enfermos, que sepan cómo actuar con ellos y puedan recuperar su bienestar emocional, psicológico, físico y social.